Tengo un concepto
ecléctico de la cultura. Considero cultura casi todo lo que te plantea cuestiones que no se te hubieran ocurrido por ti misma, también
aquello que te socializa o te ayuda a hacerlo. Así que hemos tenido un fin de
semana muy cultural, sí.
Para empezar, el sábado
llevamos a la Pubilla a Alcalá de Henares. Aparte de mostrarle la casa natal de
Cervantes y de la Universidad fundada por el Cardenal Cisneros, queríamos ver
la exposición que ofrece el Museo Arqueológico Regional, La cuna de la Humanidad. Una muestra muy interesante que tiene el detalle de recordar al investigador
Emiliano Aguirre, el verdadero descubridor de Atapuerca.
Volvimos pronto
para participar en la manifestación del Día de la Mujer. Era también el primer 8
de marzo de la nieta, en el que participaba de manera consciente, sabiendo lo
que significaba. Como el gobierno del PP está ofreciendo munición en abundancia
contra las mujeres –contra casi todos, menos unos pocos privilegiados, a decir
verdad- la manifestación de este año ha sido más numerosa que las de ediciones
anteriores. Y más animada. Y más bulliciosa. Y más divertida.
Batucadas y
charangas acompañaban y ponían música a los eslóganes habituales: Aborto libre
y gratuito, Mujer sin la lucha nadie te escucha, Fuera los rosarios de nuestros
ovarios, a los que este año se añadían alusiones muy precisas al ministro de
Justicia como responsable del proyecto de ley contra el aborto -Gallardón
dimisión-, o contra el clero, tan beligerante en esta materia (y tan
comprensivo en otras): Hay que quemar la conferencia episcopal.
Pero la Pubilla
se quedó con la cantinela “Si el papa estuviera preñado el aborto sería sagrado”
y desde anoche va canturreando por la casa el mensaje anticlerical. Lo cual
tiene su aquél porque la niña, aparte de pasar los fines de semana con sus
abuelos, a diario va a un colegio de frailes. Ya la hemos puesto en situación y
ella, que es lista, sabe que, de la misma manera que en casa no reza, en el
colegio no debe recitar determinados eslóganes. Ni se te ocurra repetirlo, la
hemos dicho. Se lo contaré sólo a mi amiga, nos ha prometido. Por si acaso, me he
leído el documento en el que se nos confía su tutela ocasional y no dice nada
de que esté prohibido llevarla a manifestaciones.
En vista de lo
cual esta mañana hemos ido a la concentración que la Plataforma en Defensa de la Cultura organizaba en el Paseo de Recoletos. Quieren llamar la atención sobre el acoso que sufre todo lo que se relaciona con la actividad cultural -la subida del IVA no es el único- y la amenaza de privatización de lo que aún queda en pie. Un llenazo. Varios miles de
personas, mayores, jóvenes, niños, ambiente festivo, como procede puesto que es
domingo. Hay pequeños estrados en los que se lee poesía, se hacen malabares, se
leen fragmentos dramáticos, se improvisan discursos en los que invariablemente
se quejan del trato que el gobierno está dando a la cultura y, muy
especialmente, a quienes han hecho de ello su forma de vida.
Creo percibir un
aire nuevo en la gente, un hartazgo por encima de lo soportable, una
resistencia también nuevas, una determinación de combatir tanta injusticia, una
decisión colectiva, un empuje, algo parecido a un atisbo esperanzador. En el
paseo nos cruzamos con muchas caras conocidas: actores, directores, algún
escritor y un puñado de políticos socialistas madrileños. Una pareja de edad
porta una bandera republicana, hay grupos con disfraces variados, otros grupos
con camisetas en defensa de la enseñanza pública, pancartas con eslóganes de
todo tipo. Me llama la atención uno que porta un hombre mayor: Con cultura lo
del PP tiene cura.
En realidad, con
cultura todo tiene mejor cura. Con un poco más de cultura no hubiéramos
consentido que Zapatero, con la inestimable ayuda de Rajoy, hubieran reformado
la Constitución deprisa y corriendo para obligarnos a pagar la deuda antes que
la educación o la sanidad públicas. Con un poco más de cultura no hubiéramos
permitido que Zapatero congelase las pensiones y recortara los salarios de los
funcionarios mientras mantenía intactos los privilegios de una casta de poderosos
ni que el mismo presidente indultase al consejero delegado del Banco Santander,
Alfredo Sáenz, condenado por corrupción, media hora antes de abandonar la
Moncloa.
Con un poco más
de cultura no consentiríamos que el gobierno nos faltara al respeto
permanentemente, no ya sólo con las decisiones que adopta contra los intereses
de los ciudadanos y a favor de un lobby de poderosos, mintiéndonos sin rubor,
afirmando que hacen lo contrario de lo que realmente llevan a cabo, falseando
datos u omitiéndolos cuando les place, negándose a explicar las decisiones que
adoptan, incumpliendo sistemáticamente el programa con el que se presentaron a
las elecciones e introduciendo nuevas normas a petición de grupos de presión
poderosos, incluida la iglesia católica que, sobre no pagar impuestos, le dice
al gobierno donde debe aplicar lo que recauda de los que sí pagamos. Y, en fin,
con un poco más de cultura ni al gobierno se le ocurriría ni los ciudadanos lo
consentiríamos que la mitad de los ministros se remitan a todos los santos de
la corte celestial para que resuelvan aquello que les ha sido encomendado a
ellos y por lo que cobran un salario sustancioso.
Estas ideas y
algunas de parecido tenor le vamos explicando a la Pubilla cuando volvemos a
casa. Se ha cortado el tráfico desde Colón a Atocha por lo que se pasea plácidamente
por medio de la calzada, normalmente saturada de coches. Le hablamos de la
importancia del conocimiento, de la rentabilidad de la investigación, de la
necesidad de mejorar nuestro propio pensamiento, nuestra formación personal. Observo
que el quiosco de flores que había junto al hotel Ritz ha cerrado. En uno de
sus costados alguien ha escrito: Wert-güenza. Exactamente.
No es ecléctico tu punto de vista sobre la cultura; desde la antropología se puede comprobar que es el concepto que más definiciones ha recibido por los estudiosos de la cuestión, una de las definiciones que se considera, sin embargo, más completa es la de Edward Tylor que la definió de la siguiente manera: "Cultura es ese todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, la costumbre y cualesquiera de otros hábitos y capacidades ADQUIRIDOS por el hombre COMO MIEMBRO DE LA SOCIEDAD".
ResponderEliminarSaludos
Esta educación o cultura de vida que le estais dando a la Pubilla va a hacer de ella una mujer digna de su abuela, de su madre....un placer sin duda.
ResponderEliminarNo temas son muy listo estos peques, en el cole "visten el santo" divinamente.
Un beso manifiesto y estoy con los del quiosco de flores, no solo sin cultura nos pasa lo que nos pasa, es que sin belleza, la vida no es tal.