Se
inauguró el 4 de noviembre del año pasado y estará abierta hasta
el próximo 14 de febrero. La de hoy es la tercera visita que hago a
la exposición del Caixaforum Mujeres de Roma. La
primera vez fuimos con la Pubilla, a quien le pareció estupenda.
¿Estupenda por qué?, le pregunté. Porque ves cómo los romanos
miraban a las mujeres, comentó la nieta. La segunda, fui
con una amiga. Íbamos hablando de otras cosas y la miramos un poco
por encima. Hoy he ido sola, incluso he cogido la audioguía para
empollármela bien.
En
realidad, la exposición, organizada en colaboración con el Museo
del Louvre, es de una gran belleza. Si eres capaz de dejar la mente
en blanco, sin hacerte preguntas, disfrutarás del recorrido porque tiene algunas
esculturas, relieves y tablillas hermosísimas. En la segunda sala,
hay una Mesalina con Británico en brazos, de la que son deudoras
muchas de las maternidades marianas posteriores.
Para que lo tengas claro desde el principio, la
exposición deja clara una cosa: los romanos consideraban a la mujer
un ser inferior a sus pares masculinos y su papel social estaba en
función de su posición en la familia. La vis materna
era equivalente a la virtus masculina. A mayor abundamiento,
la palabra virtud deriva etimológicamente de la palabra vir, esto
es hombre.
Esto
es así te pongas como te pongas, en consecuencia, es mejor que te
relajes y sigas el recorrido con tranquilidad. Hay una sala dedicada
a Venus realmente interesante y Las tres Gracias del Louvre
justificarían por sí sola varias visitas.
En
la sala dedicada a las divinidades femeninas se alude a Minerva y
Diana, divinidades castas y feroces, de las que se explica que “no
asumen las funciones de esposa y madre y por eso son respetadas y
temidas”. Así que ya lo sabéis, chicas, lo que tenéis que hacer
si os topáis con un tipo de esos que aún dudan de si las mujeres
tienen que tener derechos de ciudadanía. Les gustan castas y
feroces, no te fastidia.
La
exposición termina con una grandiosa Polimnia. Pero quedan tres
semanas para verla, ya os podéis dar prisa.
si consigo ir a madrid, no me la pierdo!!! esa y la de ingres del prado!!! lo que no sé es si voy a ser capaz de escaparme de aquí (y mira que pido poco, que yo a madrid voy y vuelvo en el día), pero no hay manera últimamente ni de sacar un día!!!
ResponderEliminarbesotes!!
Creo que en ocasiones hay tan sólo que dejarse llevar por la belleza, sin pensar.
ResponderEliminarLo merecemos