La
viajera ha intentado presentar a Lagos como una ciudad histórica,
apacible y divertida como destino de vacaciones. Pero, parece claro
que si alguien elige viajar a una playa es porque quiere disfrutar
del mar. Lo cual no es un axioma que pueda generalizarse porque los
viajeros han encontrado turistas que se desplazan a playas
paradisíacas en lugares remotos y luego se apalancan en la piscina
del hotel con una copa de piña colada y no pisan la playa para no
mancharse con la arena.
Si
alguien gusta de pasear por la playa, de gozar de los paisajes, de
adormecerse con el rumor del agua, incluso de bañarse en el mar con
el agua fría, este es su lugar. De todo ello tiene Lagos oferta
sobrada.
Ya
quedó dicho que el hotel de los viajeros incluye en sus servicios el
traslado en autobús a la playa, las tumbonas y las sombrillas. Meia
Praya, donde desemboca el río Alvor, es la playa del hotel; una
extensión de cuatro kilómetros de arena. Algunos historiadores
sitúan en estas aguas el punto donde en 1552 naufragaron los
galeones que transportaban el tesoro de Moctezuma, después de haber
sido capturado por Hernán Cortés.
En
Meia Praia hay bastantes hoteles, alguno de los cuales se publicita
como “en primera línea de playa” sin faltar a la verdad porque
entre el establecimiento y el agua no hay nada que se interponga,
pero el aspirante a bañista deberá recorrer medio kilómetro a pie
-o en bici- porque en Lagos la protección medioambiental es una seña
de identidad. El hotel de los viajeros -que luce el eslogan de “Isla
ecológica”- está lleno pero el microbús a la playa va casi
siempre medio vacío porque los turistas parecen preferir la piscina
o, quizá, optan por otras playas.
Porque
Lagos está superdotada de playas, a cual mejor. Junto al fuerte
Ponta de Bandeira, se encuentra la playa de Batata, un poco más allá
la de Pinhâo, luego la de Doña Ana, después de Camilo y, tras
doblar la Punta de Piedade, Carnaval, Porto de Mos y playa de la Luz.
Excepto la de la Luz, que es un arenal amplio, favorito de los
británicos, el resto son pequeñas calas de arena blanca y aguas
verdes, protegidas por paredes rocosas.
La de Doña Ana aparece entre
las diez mejores playas de Europa. Cualquiera de ellas, incluso otras
menores a las que sólo es posible acceder desde el agua, son
maravillosas. Sólo tienen una pega, hay que bajar cientos de
escaleras para llegar al agua y, lo que es peor, subir otras tantas
para volver a la civilización. Demasiado para la viajera, que es ya una
anciana venerable.
En
consecuencia, los viajeros aprovechan uno de los muchos recorridos
marítimos que se organizan por el litoral y así pueden comprobar
que las descripciones turísticas que hablan de la belleza de este
litoral, incluso se quedan cortas. La misma comprobación empírica
realizan a diario cientos de visitantes por lo que el recorrido,
escenario aparte, es lo más parecido a un paseo por la Gran Vía de
Madrid en época navideña. Pequeño matiz que no merma en nada el
encanto del paseo.
El
lobo de mar que gobierna la barca fuera borda en la que salimos de la
Marina de Lagos, nos obsequia con un bautismo de mar ya en el canal
de Bensafrim haciendo balancearse el cascarón como si fuera una
nuez. Todos aguantamos el tipo -mojados pero impertérritos- como si
a diario nos dedicáramos a la pesca del atún en el Índico.
La
barca va sorteando como puede una fila de canoas, varios grupos de
bañistas, buceadores, otras barcas como la suya e, incluso, un buzo
que muestra su captura del día: un pulpo de tamaño regular. El
condottiero de nuestra barca hace sonar una caracola para mejor
ambientar el viaje. No es preciso, los viajeros ya están
suficientemente embelesados.
¡Ah, el Algarve! ¡Qué maravilla de
lugar!, coinciden en mar y en tierra firme.
Hola amigos de Contando los Sesenta,
ResponderEliminarOs saludamos desde Travel Republic y queríamos felicitaros por vuestro blog y por el post sobre el Algarve. Queríamos compartir con vosotros nuestra oferta hotelera en esta zona con lo que esperamos poder ser de ayuda para vosotros y vuestros lectores cuando planifiquen su escapda: https://www.travelrepublic.es/v2/hoteles/portugal/algarve.html ¡Muchas gracias!