lunes, 15 de julio de 2013

El machismo mata siempre

El jurado popular ha declarado culpable a Bretón del asesinato de sus hijos. Con ese afán por el morbo que caracteriza a la prensa en estos últimos tiempos, hemos podido conocer con todo detalle la vida de dos personas sin más bagaje para la condición de famosos que haber protagonizado un drama desgarrador.

Ella, licenciada, con profesión y empleo -no era una persona indocumentada-, admite que soportó malos tratos psíquicos hasta que decidió poner fin a la relación. Él, sin empleo y sin profesión conocida, se rebeló ante la decisión de su mujer de separarse.

- Me las pagará, se arrepentirá de lo que me ha hecho, repetía el marido. Y, de acuerdo con la sentencia, el precio de ese pago fue la vida de los niños. De sus hijos.

Los testigos sostienen que soportaba mal que fuera su mujer quien llevara el sustento familiar y él quien atendiera las tareas domésticas. Le retratan como un hombre frío, controlador, manipulador, poco o nada afectivo. Los psiquiatras dicen que no sufría ninguna patología: era una persona normal.

Sobrecoge conocer cómo esa persona normal planeó la venganza contra su ex mujer. Sería preferible pensar que se trata de alguien enfermo, víctima de cualquier patología psíquica. Pero no, ese hombre capaz de planificar con tanto detalle el asesinato de sus hijos y rodearse de circunstancias para justificar un relato que le exculpe es un hombre “normal”, tan normal que no entiende que su mujer es una persona igual que él.

¿Cómo es posible que un ser humano sea capaz de hacer eso a sus propios hijos, unos niños indefensos? ¿Hasta qué punto tenía envenenada la mente por la toma de decisión de su mujer?

El pasado sábado, La 2 de TVE ha emitido un reportaje muy ilustrativo. Spots publicitarios de hace décadas intercalados con fragmentos de telediarios en los que se informa de otros tantos asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o ex parejas. En uno de los spots se ve cómo un marido abofetea a su mujer y se va airado de casa. No le enfades, sé amable con él que viene cansado de su trabajo, le sugiera la voz sabia a una jovencísima Laurita Valenzuela en la figura de la mujer agredida. El problema se soluciona con una marca de coñac. En otro anuncio, un hombre comenta: De toda la vida el hombre ha ganado más que la mujer. De fondo, una cancioncilla ironiza sobre el afán de las mujeres por trabajar en empleos fáciles.

Así han sido las cosas “de toda la vida”. Así son en alguna medida todavía. Un machismo subyacente y transversal que nos acompaña de por vida por más esfuerzos que hagamos las mujeres. El machismo mata. Siempre. A veces mata cruentamente, siempre psíquica, anímicamente. Mata a las mujeres y embrutece fatalmente a los hombres.     

Sorprende que, entre los muchos comentarios y los cientos de análisis que se han publicado en torno al asesinato de los niños de Córdoba a manos de su padre, se haya pasado por alto su carácter intrínsecamente machista. Mata para castigar a la mujer que decide por su cuenta.

Si no fuera por su larga trayectoria misógina, sorprendería también el silencio de la iglesia católica, tan metomentodo en cuestiones de sexo, ante tanta muerte, ante tanto asesinato horrendo. Ese silencio clamoroso de los púlpitos, de las conferencias episcopales, tan atentos siempre a otros asuntos de mayor enjundia.

Sorprende la ausencia de un proceso intenso y masivo de investigación impulsado por los hombres acerca de los mecanismos por los que el machismo mueve a los hombres. Los hay, pero muy minoritarios, aún. Sorprende que los hombres no se den por aludidos de que cuando se habla de machismo ellos son los concernidos: las mujeres ponemos las víctimas pero ellos ponen los asesinos

12 comentarios:

  1. El machismo se adapta al medio, camabia las formas de penetrar o mantenerse en el incosnciente colectivo de hombres y mujeres y aún no hemos encontrado el modo de pararlo, quizá porque ellos aún no se han plantado y dicho NO. No en mi nombre, porque ser hombre es mucho más que es.

    Quizás debamos seguir en la lucha, incluso cuando creemos que en nuestro entorno ya está la batalla ganada. A la que se somete, normalmente le pasa menos que a la que se decide a coger la puerta.

    Un beso

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    1. Esa es la cuestión, Pilar, que ELLOS no acaban de darse por aludidos y nosotras seguimos pensando en qué estaremos haciendo mal.
      La que se somete se salva, y no siempre, porque pasa a un "no ser".
      Hay que aprender a elegir mejor, en primer lugar, y a no coger la puerta sino a darles con ella en la crisma. O algo así, no sé.

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  2. Ahora, en la época en la que un hombre llega primero a casa y la ve sucia, se pone a limpiar con la intención de que cuando lleguen su mujer y sus hijas, puedan irse antes a la piscina, llaman más la atención estas cosas.

    Pero no hay más que ver como mencionas, la historia de la televisión, las películas (jolín con Paco Martínez Soria y similares, cuanto machismo puesto junto y no sólo por la mano en el muslo...) relativamente reciente, como ha sido nuestra cultura hasta el concepto tan reciente de lo "políticamente correcto"

    Soy joven, y he crecido con películas que decían "Si le hubieras dado una bofetada a tiempo, sabría quien manda en casa"

    Que no harán los que lo han escuchado más años, y se ven apoyados por sus madres, padres y vecinos en sus opiniones...

    Besos

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    1. Ten en cuenta también que incluso quien limpia y comparte tareas a veces conserva un substrato de superioridad. Él es bueno y por eso contribuye a las labores domésticas, se dice a sí mismo. Nunca piensa que es su mujer la buena porque le ayuda a él. Es una cuestión de mentalidad.

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  3. La polémica sería... Es solo machismo por no tolerar que su mujer tomara decisiones propias o un caso extremo de violencia familiar?
    Entiendo que hay tipo que no toleran que se les contradiga ni que se someta a juicio sus acciones, yo misma lo he padecido con mi exmarido, con una posterior persecución, etc. ya sabemos. Pero la mente criminal de este hombre, del cual no conocía la historia, seguramente debe tener antecedentes de violencia que nadie denunció, o si alguien lo hizo no fueron escuchados.
    Lamentablemente el machismo retrocede tan lentamente porque muchas mujeres lo seguimos alimentando. Seguimos creyendo que la mayoría de las tareas del hogar, los cuidados de los niños y las compras, solo por dar algunos ejemplos, son tareas nuestras y nadie puede hacerlo mejor que nosotras. Error!!!!
    Pero hay que interiorizarlo, no va a quedar otra. Entonces los casos de violencia empezaran a disminuir, porque no somos posesiones de nadie.

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    1. Al margen del caso concreto que comentaba, en España mueren una media de 60 mujeres al año por violencia machista y aún seguimos creyendo que es un problema de las mujeres. Lo es en la medida en que somos las muertas pero el problema real deberían asumirlo los hombres. ¿Qué para reducir las tasas de machismo en sangre? Creo que falta una verdadera política en esa dirección.

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  4. Leo en este post que el acusado Bretón es considerado una persona normal, yo creo que quien le considere una persona normal, que se lo haga mirar.
    Este caso ha sido utilizado por los medios para desviar la atención de lo principal, es una vergüenza nacional la atención de todos los canales de TV que se han volcado al unisono en la noticia, así nos va.
    Yo estoy operado hace ahora tres años de un tumor cerebral y gracias a Dios estoy fenomenal, pero hasta que no me intervinieron, yo no era el mismo que era antes, osea cuando se me consideraba normal.
    Saludos

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    1. Son los psiquiatras quienes determinaron que Bretón era una persona normal en el sentido de que no padecía ninguna psicopatía. Pero, lamentablemente, los machistas son considerados normales, sin excepción y ahí subyace el germen de la violencia que conduce a la muerte de las mujeres.

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  5. El problema real se disfraza de Psiquiatra, Machista y Adicto al régimen
    Que pena!!

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  6. Lo acabo de leer en un blog la siguiente frase: "el machismo se nutre de las mujeres", comparto bastante esta frase en la medida que hasta no hace mucho tiempo y aún hoy una inmensa mayoria de mujeres lo siguen haciendo los que en casa educan a los hijos, frases como "que tu hermana quite la mesa" u otras lindezas son indicativos de que el machismo se inicia en casa continua con la educación y se incrusta en la política que hace la leyes.

    Saludos

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    1. En efecto, así ocurre en muchos casos, pero convendrás en que las mujeres que así obran son también víctimas de una educación que les ha inculcado que ese es su papel. Es un problema de socialización, no de determinismo. Hará falta mucha educación en igualdad y mucha convicción social para que los hombres asuman que las mujeres son igual que ellos y que las tareas domésticas y el cuidado de los hijos les atañen tanto como a sus parejas. Y más educación en igualdad aún para persuadir a los hombres que un hombre que agrede no es un siete machos, sino un cobarde. Porque siempre agreden a los débiles, no al coronel de la Guardia Civil, por poner un ejemplo.

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  7. llevo un rato cotilleándote el blog (que me encanta) y en esta entrado no he podido no decir nada...
    problema de educación, claro... de ellos y de nosotras... nos han enseñado por un lado que ya no teníamos que luchar, porque ya eramos iguales (cosa que no es verdad) y entre las canciones y las películas nos han grabado a fuego aquello de que "quien bien te quiere te hará llorar", frase que debería disparar todas las alarmas que se nos han dormido dentro...
    necesitamos aprender a querernos para saber como queremos que nos quieran... y necesitamos que ellos aprendan, que como bien dices, el que ayuda en casa no es que sea la bomba la traca, es que hace lo que toca (ni mas ni menos que su compañera/esposa/amante cariñosa)

    y antes de darle a enviar, una reflexión al hilo de lo que decías de la publicidad: el otro día me preguntaba porque leches había un montón de mujeres en bragas en la tele para venderme unas compresas?... al fin y al cabo somos nosotras las que las compramos... entonces, repito: qué necesidad hay de que salgan un montón de niñas monísimas en bragas?...
    yo la verdad es que no entiendo que necesidad hay... pero eso es lo que hay...

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