miércoles, 6 de enero de 2016

Mire usted, señor Rajoy

Mire usted, señor Rajoy, usted no es una persona decente, le espetó Sánchez al candidato popular en el debate a dos de la campaña electoral. Directamente, sin vueltas ni circunloquios.
Pero todo ha sido conocer el resultado de las urnas y la mayoría de políticos han vuelto a hablar en ese dialecto privado e incomprensible que solo utilizan ellos. Por ceñirnos solo a los dos candidatos con posibilidades de presidir el próximo gobierno, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, ahí los tenemos:
Sale Rajoy y dice que con 200 diputados haría virguerías en materia de reformas. No aclara de dónde piensa sacar esos 200 voluntarios, si él solo tiene 123 diputados, uno de ellos huero. Tampoco explica qué tipo de reformas, lo que, con sus antecedentes, es una explicación sumamente necesaria. Sale, suelta su speech y se va.
Sale Sánchez y dice que Rajoy no cuente con él, mira en derredor y se va. Lo de mirar en torno suyo es medida sabia porque en el entorno socialista vuelan los cuchillos que al menor descuido alguien va a salir en carne para albóndigas.
Así llevamos desde el día 20, una y otra vez. Cada cual recita su monólogo y se va, como en el Club de la Comedia. Hablan con soniquete, como los malos actores de teatro. Con perífrasis, como si fuéramos niños que no entendiéramos de qué va la historia.
Pero no somos niños y entendemos bien.
a. Que Rajoy quiere seguir gobernando como si tuviera mayoría pero no la tiene y, de momento, no tiene con quién pactar.
b. Sánchez quiere gobernar como si tuviera mayoría pero no la tiene y sus pares no le dejan pactar para alcanzarla, no sea que vaya a gobernar y arruine sus expectativas, la de los pares.
Y así estamos. Con lo fácil que sería hablar claro. En castellano, catalán, gallego o euskera, pero claro. Y llegarse a la Moncloa y decir:
Mire, señor Rajoy, no puedo pactar con usted porque no es digno de gobernar un país quien ha convertido la política en un lodazal, ha amparado a la banda de maleantes en que se había convertido una parte de su partido, incluido su protegido, Luis Séfuerte.
Mire, señor Rajoy, no puedo pactar con usted porque lo primero que pienso hacer es derogar las leyes que usted y los suyos aprobaron y que han hecho retroceder a España décadas en progreso y en derechos.
Mire, señor Rajoy, no puedo pactar con usted desde un plasma, así que si quiere seguir haciendo el indio, pegue la oreja al terreno para saber qué es lo que ocurre en las calles, en las casas, en las empresas, en las escuelas, en los hospitales de este país.
Mire, señor Rajoy, usted tiene detrás 122 diputados, uno de ellos huero, pero no voy a pactar con usted porque representa una manera de hacer política que ya era vieja cuando se aprobó la Constitución de 1978 y ahora mismo es imprescindible regenerar la política y la sociedad española.

Y aclaradas las cosas, ir al grano. Pero ya, que no están las cosas para ir perdiendo el tiempo.

2 comentarios:

Lo que tú digas